El primer ministro británico Rishi Sunak afirma que cualquier persona que llegue al Reino Unido de manera ilegal no podrá quedarse. Esta declaración se produce en medio de una nueva legislación que se espera promulgar la próxima semana. Sunak ha hecho de la detención de las pateras una de sus cinco prioridades clave, en respuesta al flujo constante de inmigrantes que llegan a Gran Bretaña a través del Canal desde Europa.
El periódico Mail on Sunday informa que se presentará una nueva ley para abordar el problema de la inmigración ilegal en el Reino Unido. El año pasado, más de 45,000 personas realizaron la peligrosa travesía, lo que ha llevado a Sunak a tomar medidas para restringir la entrada ilegal al país.
Bajo la presión de los legisladores, el ex primer ministro Boris Johnson acordó enviar a Ruanda a decenas de miles de inmigrantes, muchos de ellos procedentes de Afganistán, Siria y otros países en guerra, a más de 6,400 kilómetros de distancia. Sin embargo, la política ha enfrentado una batalla legal después de que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos bloqueara el primer vuelo de deportación.
El ministro del Gobierno, Chris Heaton-Harris, afirma que aquellos que lleguen al Reino Unido de manera ilegal no podrán solicitar asilo. En cambio, serán devueltos o enviados a un lugar como Ruanda. Sin embargo, Heaton-Harris también asegura que habrá rutas seguras y legales para aquellos que busquen refugio.
En conclusión, el Reino Unido está tomando medidas para impedir la entrada ilegal en el país. La nueva ley aún tiene que ser promulgada, pero aquellos que lleguen de manera ilegal pueden ser devueltos o enviados a otro lugar. También habrá rutas seguras y legales disponibles para aquellos que busquen refugio en el Reino Unido.
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