«Registros históricos: Saudi Aramco reporta ganancias récord de 161.100 millones en 2022»

Este anuncio ha situado a la compañía en una posición de liderazgo frente a otras empresas internacionales como BP, Shell y Chevron, que también presentaron resultados similares en febrero. En concreto, los beneficios obtenidos por Aramco triplican a los de Exxon del mismo año.

En 2022, los precios del petróleo experimentaron fuertes oscilaciones debido a las preocupaciones geopolíticas derivadas de la guerra de Ucrania y a la menor demanda de China, el principal importador, así como a la incertidumbre en torno a la contracción económica mundial. A pesar de estas fluctuaciones, Aramco prevé que el petróleo y el gas seguirán siendo esenciales en un futuro previsible.

Con el objetivo de hacer frente a estos retos, la compañía ha decidido invertir en nuevas tecnologías con menos emisiones de carbono y con potencial para lograr reducciones adicionales en cuanto a la emisión de gases. Además, los planes para aumentar la capacidad de producción de crudo a 13 millones de barriles diarios (bpd) en 2027 van por buen camino.

Aramco ha declarado un dividendo de 19.500 millones de dólares para el cuarto trimestre, lo que supone un aumento del 4% respecto al trimestre anterior. Además, el flujo de caja libre alcanzó la cifra récord de 148.500 millones de dólares en 2022, frente a los 107.500 millones de 2021.

La empresa espera que el gasto de capital para el año en curso se sitúe entre 45.000 y 55.000 millones de dólares, incluidas las inversiones externas.

En resumen, el gigante petrolero saudí Aramco ha presentado unos resultados récord en 2022 gracias a su capacidad para adaptarse a los cambios del mercado y a su inversión constante en nuevas tecnologías. A pesar de las fluctuaciones en los precios del petróleo, la empresa mantiene una posición de liderazgo en el mercado.