La presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, ha manifestado su optimismo sobre las conversaciones sobre el fin del motor de combustión, esperando que la solución sea «lo antes posible». En una reunión del Consejo de Ministros alemán, Von der Leyen afirmó tener diálogos «constructivos» con el Gobierno alemán para encontrar un equilibrio entre la libertad tecnológica y los objetivos climáticos.
El objetivo es que a partir de 2035 solo se puedan comercializar vehículos que no emitan dióxido de carbono. Sin embargo, las negociaciones se han aplazado debido a la oposición del ministro de Transporte alemán, Volker Wissing, quien demanda más garantías para los motores de combustión que usan combustibles sintéticos limpios.
El desacuerdo ha reavivado tensiones en la coalición de socialdemócratas, verdes y liberales liderada por el canciller alemán, Olaf Scholz. Sin embargo, este ha defendido la necesidad de encontrar una solución y se ha esforzado por lanzar un mensaje de unidad.
En el retiro de dos días emprendido por el gabinete de Scholz, se abordarán otras cuestiones presupuestarias y de tensiones políticas. La esperanza de Von der Leyen es que las conversaciones concluyan con éxito para ofrecer certidumbre a la industria automotriz lo antes posible.
En resumen, Von der Leyen espera que la solución al fin del motor de combustión se encuentre pronto para lograr un equilibrio entre la libertad tecnológica y los objetivos climáticos, y dar certeza a la industria del automóvil. Las conversaciones continúan entre la CE y el Gobierno alemán para encontrar una solución a la oposición del ministro de Transporte alemán. La coalición política liderada por Scholz intenta encontrar una solución en el retiro de dos días donde se abordarán otras tensiones políticas y presupuestarias.